Escuelas públicas y la bayoneta omnipotente del Estado
Se gastan enormes sumas en «reformar» las escuelas gubernamentales, para acabar con el mismo producto pésimo. Pensar con originalidad significa abandonar por completo las escuelas públicas.
Se gastan enormes sumas en «reformar» las escuelas gubernamentales, para acabar con el mismo producto pésimo. Pensar con originalidad significa abandonar por completo las escuelas públicas.
Al oponerse públicamente al Apartheid, William H. Hutt vio cómo la segregación legal privaba a los sudafricanos negros de perseguir objetivos económicos legítimos. Para Hutt, el apartheid privaba a las personas de la igualdad de oportunidades económicas, lo que las mantenía en la pobreza.
Se supone que los funcionarios de control de animales deben, bueno, controlar a los animales de un término municipal. Pero gracias a las políticas de control animal, son los animales callejeros los que controlan la ciudad de nuestro autor.
Los enemigos de la libertad individual son numerosos, desde los izquierdistas que consideran que la libertad interfiere con las «libertades positivas» que ofrece el Estado hasta los conservadores que creen que demasiada libertad destruye las relaciones comunitarias.
Al igual que la administración Biden, las élites de la Unión Europea pretenden aplastar la libertad de expresión en Internet en nombre de la prevención del «discurso de odio» y la «desinformación». Por supuesto, las clases dirigentes de la UE no tendrán que preocuparse por ser censuradas.
La gente suele aferrarse obstinadamente a falsas creencias, una de ellas que la regulación gubernamental de la conducción evita el caos. Parece ser cierto lo contrario: la intervención del gobierno en cualquier cosa, incluido conducir un carro, crea el caos que afirmamos querer evitar.
Aunque los conservadores y los seguidores de la economía austriaca suelen tener mucho en común, muchos conservadores están en contra del libre comercio y el libre intercambio. Los austriacos tienen que explicar cuidadosamente por qué esas creencias son perjudiciales.
La gente ha llegado a creer que sólo el Estado está moralmente capacitado para crear y mantener un sistema de justicia. Sin embargo, dado que el propio Estado actúa injustamente, quizá sea hora de mirar fuera del Estado.
Ha habido mucha histeria en torno al auge de la inteligencia artificial, mucha de ella exagerada y francamente tonta. No, la IA no está a punto de imponer la tiranía a la humanidad indefensa. Como cualquier otra tecnología, la IA es una herramienta que puede utilizarse para bien o para mal.
En menos de un siglo, Argentina pasó de ser una de las naciones más ricas del mundo a otra que lucha contra la pobreza y la inflación masiva. Acción humana aporta sabiduría duradera para mejorar la vida en ese país.